Los diseños de la naturaleza están determinados por el control de la energía, son diseños ‘óptimos’ producto de un lento proceso de adaptación al medio. Durante siglos la arquitectura también respondía a esa misma necesidad, hasta que el objeto arquitectónico dejó de ser racional porque se disponía de una producción de energía que parecía ilimitada. Pero un nuevo modelo se impone ante el deterioro del medioambiente, y en este artículo el profesor de construcción Ramón Araujo propone volver a los fundamentos y lograr una arquitectura capaz de satisfacer nuestras necesidades empleando racionalmente los recursos.
Hospital de Vallecas. Araujo, Berned y Vidal, Vallecas, Madrid. La reducción de las ganancias por insolación es una estrategia relevante en los edificios muy extensivos y con altos factores de forma. Las cubiertas se ajardinan y los acristalamientos se retrasan, reforzando la sombra con parasoles.